21 diciembre, 2009

AVATAR Y EL MITO DEL BUEN SALVAJE

La película de Avatar me da pie a hablar de varios temas que, en mi opinión, están consciente o inconscientemente detrás del argumento. En primer lugar, la historia es, sin lugar a dudas, una readaptación del mito del “buen salvaje” creado hace cerca de cinco siglos con motivo del descubrimiento y conquista de América. Según esta vieja fantasía, los indígenas, al igual que los azulados protagonistas de la peli, eran una especie de seres humanos ingenuos y bondadosos que vivían en paz y armonía con la naturaleza, mientras que los españoles representaban todos los vicios y degeneración del hombre civilizado. Sin lugar a dudas, detrás de la difusión de esta idea hubo personajes como fray Bartolomé de las Casas que trataron de atraer a la opinión pública en favor de la defensa de los naturales del Nuevo Mundo. Posteriormente, los ilustrados europeos recuperaron este mito con una doble intención: por un lado, filósofos como Locke o Rousseau lo utilizaron para defender, frente a la opinión de Hobbes de que “el hombre es un lobo para el hombre”, la idea de que el ser humano es bueno por naturaleza y que es la civilización la que lo corrompe; mientras que por otro lado, las historias de salvajes que vivían en un supuesto estado primigenio puro en el cual no había ni jerarquías, ni ricos ni pobres porque todos colaboraban de una manera casi “comunista”, eran la excusa perfecta para criticar la sociedad en la que vivían y, en último término, el absolutismo. En este mismo sentido, James Cameron no podría haber sido más oportuno, el estreno de Avatar se produce tan solo unos días después del vergonzoso fracaso de la Cumbre de Copenhague sobre el cambio climático en la que, en el fondo, está un tema que subyace en la película: cómo el hombre es capaz de anteponer sus intereses económicos inmediatos sobre la salud del planeta a largo plazo. Una vez más la ciencia ficción viene a reflejar las obsesiones, preocupaciones o miedos de la sociedad de cada momento.
Asimismo, (aviso que ahora voy a revelar una pequeña parte del argumento que, por otra parte, es totalmente previsible desde el primer minuto de película), el hecho de que el héroe protagonista decida abandonar a los corrompidos invasores para ponerse del lado de los nobles y bondadosos habitantes del planeta Pandora tampoco es nuevo en la historia. Gonzalo Guerrero fue un español que naufragó en las costas del Yucatán el año de 1511, después de estar a punto de ser ejecutado por una tribu de indios y de ser esclavizado por otra, logró escapar, llegando a casarse con una princesa india y a convertirse en cacique de un pueblo maya. Las crónicas cuentan que se tatuaba y vestía como un “salvaje” y desde el primer momento decidió preparar a los indios frente a la inminente invasión española, instruyendo a sus guerreros para que no temiesen ni a los caballos ni a las armas de fuego. Logró rechazar varias incursiones españolas hasta que en 1536 fue muerto por un disparo de arcabuz cuando trataba de ir en ayuda de un pueblo de Honduras.
No se en qué estaría pensando James Cameron cuando escribió el argumento de Avatar o de dónde le vendría la inspiración, pero de lo que si estoy seguro es de que existe un imaginario colectivo lleno de mitos que siempre han fascinado a la humanidad y que, como en el caso de Star Wars, si se utilizan con inteligencia pueden dar como resultado un taquillazo.



El mito del "buen salvaje" llega hasta el siglo XX, los frescos de Diego Rivera sobre la cultura azteca son un buen ejemplo

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Y la historia de Álvar Núñez Cabeza de Vaca -hay que leer "Naufragios y comentarios", yo me lo pasé en grande- también es del mismo tipo que la de Guerrero, ¿no Alberto?. ¡¡Es un tema fascinante!!, y creo que hay más casos: el español que llega a tierras americanas antes que los conquistadores, descubre una nueva cultura, se mezcla con los aborígenes, adopta su cultura y luego les ayuda a luchar contra los invasores. Segurísimo que el cine de EEUU se ha basado en la conquista española de América, o quizás también en el Joseph Conrad de "El corazón de las tinieblas", o alguna otra novela similar del novelista.
¿La historiografía no ha estudiado la difusión de este importantísimo mito?, un mito que tiene debates implícitos como el del "buen salvaje", el de "libre albedrío" o la volición individual ante las sociedades que lo quieren controlar todo, el de la destrucción del medio ambiente y los pueblos indígenas, el de la prepotencia del ser humano, que imita a la naturaleza o a Dios, como también el choque entre culturas: un mito con muchísimas y fundamentales implicaciones intelectuales ...Por cierto Albert, ¿existió el cura Jerónimo de Aguilar, personaje retratado por Torcuato Luca de Tena en la novela "El futuro fue ayer"? PEDRO (Madrid)

Alberto Baena Zapatero dijo...

Sobre Cabeza de Vaca hay una peli hispano mexicana que es un poco lenta pero que no está del todo mal, aunque casi parece una obra de teatro más que un largometraje.
De Gerónimo Aguilar lo que yo se es que naufragó junto a Gonzalo Guerrero y sobrevivió como esclavo de un cacique maya hasta que lo abandonó para unirse a Hernán Cortés y servirle como interprete en la conquista de Tenochtitlán.

Anónimo dijo...

a mi no me hace falta ser historiadora para darme cuentad e qeu esta historia ya me la han contado: pocahontas, bailando con lobos, el último samurai... pero eso sí, el rollo avatar mola!!!!!!!!!!!!
mqf

Alberto Baena Zapatero dijo...

Esta es la cultura del siglo XXI, las referencias de la sociedad no son Bartolome de las Casas o Rouseau sino Walt Diney y Kevin Kostner.
Un poco de respeto por la historia, la madre de las ciencias

Anónimo dijo...

Sí claro: Pocahontas, El último samurai, Shogun,
Bailando con lobos, Un hombre llamado caballo, Apocalipse Now y un montonazo más...Y en cuanto a historias reales: la historia de Cabeza de Vaca, la de Gonzalo Guerrero y Gerónimo de Aguilar y luego, como resultado a estas aventuras y otras el riquísimo y pionero -en todo el orbe- debate sobre los derechos humanos, sobre la naturaleza humana del indígena, la legitimidad de la conquista de América, entre Bartolomé de Las Casas y Francisco de Sepúlveda. Pero lo más interesante es que estas historias dan mucho para pensar, sobre el límite siempre voluble entre salvajismo y civilización,sobre la libertad individual o si nos dan la libertad de escoger, sobre si la civilización que hemos creado, excesivamente inquieta, depredadora para fuera -y también para dentro- vale realmente la pena. Alberto, lo que te pregunté el otro día: ¿se ha hecho un debate historiográfico, un debate profundo sobre las implicaciones de estas aventuras (Guerrero, Cabeza de Vaca...)?, si es así, ¿me puedes dar referencias?
Pedro (Madrid)

Alberto Baena Zapatero dijo...

El mito del buen salvaje ha sido tratado por la historiografía en relación con otros temas que ya hemos señalado como la polémica de los justos títulos o la crítica al absolutismo. Además, en los últimos años se han desarrollado algunos trabajos muy interesantes sobre el mestizaje y los cambios sufridos por los europeos en América, especialmente recomendables son las obras de Solange Alberro o Gruzinski.

Anónimo dijo...

Thanks Alberto!, muchísimas gracias...Y que tengas una gran entrada de 2010 en las Américas.

Pedro.

Anónimo dijo...

Hola Virrey

buen en todo caso no me queda nada claro tu articulo ¿estas de acuerdo con el mito del buen salvaje? o mas bien ¿crees que es un mito falso y utopico?
deberias pronunciarte sobre esto porque tu has recalcado -con total certeza- los origenes ideologicos de la pelicula en el sueño de un mundo feliz y comunista, pero esto te es bueno o malo???.

Alberto Baena Zapatero dijo...

Yo no me creo el mito del buen salvaje pero creo que como toda imagen depende del uso que se le de. En el caso de que sirva, como en su origen, para defender a los indígenas y criticar el absolutismo me parece bien, si por el contrario, el mito se utiliza por los indigenistas para reclamar quién sabe que cosas, no estoy de acuerdo.