EL DOS DE MAYO DE ESPE

Los actos celebrados en Madrid con motivo de la efeméride del levantamiento del pueblo de Madrid contra las tropas francesas el 2 de mayo de 1808, han vuelto a demostrar las graves consecuencias que tiene dejar la historia en manos de políticos, escritores y periodistas. Lo que los madrileños defendieron heroicamente aquel día no fue la nación española sino a la monarquía y los valores tradicionales que esta representaba frente a Napoleón, y sólo fue años después cuando, aprovechando la ausencia de Fernando VII y precisamente por influencia de la revolución francesa, aparezca por primera vez la nación española para dotarse de una constitución. El problema estuvo en la ingenuidad de pensar que Fernando VII aceptaría lo aprobado en Cádiz de buena gana, lo que le costó la vida o el exilio a las mentes españolas más avanzadas de su tiempo. Por lo tanto, visto desde nuestros días ¿Quiénes fueron los héroes en 1808, aquellos que trataron de defender a un rey incompetente y sanguinario, el orden estamental y el atraso de España, o aquellos afrancesados que trataron de adherir a su país a las corrientes políticas y sociales renovadoras que venían de Francia? Toda nación necesita crear una mitología que la dote de identidad histórica, lo malo es que políticos como Esperanza Aguirre tratan de elevar esta mitología a la categoría de historia, lo cual supone una grave manipulación de la realidad.

Por cierto, Francisco de Goya, el autor de los fusilamientos del 3 de mayo, fue acusado de afrancesado por serlo la mayoría de sus amistades, pero claro, eso no le interesa contarlo a Espe.